
Cada cierto tiempo me encuentro con compañeros y compañeras que tienen el síndrome del impostor con la ilustración. Algunos me dicen «no sirvo para dibujar» , «tú eres mejor, yo no puedo» «lo voy a dejar, no soy bueno», pensamientos, frases con miedo, dudas, mucha incertidumbre en lo que hacen y eso es cuando uno no cree en sí mismo, no se valora y se compara con los demás. Cada persona tiene un talento, cada persona tiene un estilo, una forma de ilustrar, de plasmar lo que quiere en el papel. Aquí hace falta no solo tener autoestima, sino valorar ese pequeña mejora de cada día.
De hecho, podemos de vez en cuando dudar de nuestro trabajo, pero eso no quiere decir que lo vamos a dejar o que no somos buenos. Es importante diferenciar esos pensamientos que no son constructivos y mas bien negativos que hasta nos pueden llevar a una depresión o tener un bloqueo creativo de años, así que no caigamos en el hoyo y sigamos ilustrando por nuestros sueños, por la pasión a la ilustración.




Espero te haya gustado este post y no te olvides que cada jueves subo videín, de hecho el tema reciente fue ¿Cómo conseguir ilustrar para Google y Disney? y pronto la tienda de recursos digitales estará con descuento, así que atent@s.